Seguro que muchos os habréis enterado de los problemas que ha habido con Assassin’s Creed: Unity debido a la gran cantidad de bugs y errores que ha tenido el juego. Pues bien, el último y cuarto parche pensado para corregir estos fallos, lejos de arreglar los problemas que ya tenía el juego (caídas de frames, pérdida de progreso, etc.) ha conseguido la dudosa hazaña de crear nuevos errores. Concretamente, algunos usuarios de Xbox One, se han encontrado con que el parche ocupa 40 GB en el disco duro de la consola en vez de los 6,7 GB que debería de pesar.
Pero lo peor es que no es un caso aislado, ya que Ubisoft ha confirmado la existencia este problema y aseguran estar trabajando con Microsoft para solucionarlo. Desgraciadanente, hasta que se solucione el inconveniente los usuarios de Xbox One tendrán que instalar religiosamente el parche si quieren usar las funciones online de Assassin’s Creed Unity. Ubisoft, a veces es peor el remedio que la enfermedad.