Ubisoft: simplemente no aprendes ¿verdad?

Originalmente iba a escribir 2 artículos quejándome de Ubisoft por 2 razones en específico. Pero al final he decidido crear uno solo resumiendo mis ideas. ¿Para qué hacer dos artículos criticando a la compañía si puedo hacer uno pero muy extenso? Claro que bien podría hacer 3 o hasta 4 si quisiera, porque razones sobran. Primero empiezan a regalar DLC para compensar un juego roto, más tarde resulta que amenazan a los primeros análisis de The Crew advirtiendo que no representan una opinión válida, y por si no fuese poco, prometen que este juego no tendrá errores, creyendo que tenemos memoria de pez y que para cuando salga el juego, habremos olvidado todo lo que pasó con su saga insignia. Y el motivo raíz de todo esto es el siguiente: Ubisoft trata a los videojuegos como un servicio, como un producto en su tono más peyorativo. Y ya todos sabemos qué pasa cuando las grandes compañías hacen esto.

No obstante, vayamos por partes para no enredarnos.

Ubisoft sabía que Assassin’s Creed Unity iba a resultar ser una catástrofe. El día que salió, retrasaron los análisis para que nadie se diese cuenta de ello, pero ahora que el juego es sujeto de burla en todo internet, la compañía francesa ha salido al frente con una máscara nada creíble a decir que no esperaban que pasara esto, y que por ello, trabajarán duro para corregir los bugs. Pero he aquí la cereza sobre el pastel: Ubisoft prometió regalar un DLC a todos los que hayan comprado el juego, y los que hayan adquirido el Season Pass, podrán hacerse con Far Cry 4 o The Crew. En teoría suena bien, porque vamos, si hacen un mal juego, lo menos que pueden hacer es algo así. Y exactamente ahí es donde se encuentra el problema.

Para empezar, han hecho un mal videojuego. Están tratando de arreglar algo que no debería haber sido en el primer lugar. Es como si en una operación de rodilla me cortan la pierna pero para compensarlo, me dan un implante prostético. El hecho de que tengan que regalar un videojuego para cubrir con un parche el gran agujero que han dejado, es algo preocupante. La solución no es dar regalos, y mucho menos cuando no tiene sentido que vayan a dar un DLC para un juego que no sirve. ¿Cómo se va a poder jugar una expansión cuando la obra principal está plagada de errores?

Bueno, entonces regalan un juego que no sea el de asesinos y templarios. Mal. La gente compró Assassin’s Creed Unity para experimentar la aventura de Arno durante la Revolución Francesa, y se hicieron con el Season Pass para poder seguir viviendo en ese mundo que tanto deseaban explorar, no han gastado tanto dinero para jugar un título de carreras que ni siquiera planteaban comprar en un futuro. ¿Acaso será que, como bien saben que este juego apesta, han preferido dar otro a cambio para no causar malas impresiones como compañía? Otra razón para creer que Ubisoft, en efecto, ha abandonado cruelmente a una saga que alguna vez tuvo un gran potencial.

El análisis de The Crew y la paranoia

El cómo se iba a analizar Destiny causó mucha polémica hace unos meses. Bungie no recomendaba que nadie leyera los primeros análisis del juego, porque éste al depender casi totalmente del modo en línea y al recaer en un sistema de subir de nivel, se necesitaba de mucho tiempo para poder dar un veredicto final confiable. Ahora tenemos a Ubisoft repitiendo casi las mismas palabras.

Sí, The Crew es un videojuego con un componente en línea, pero es un videojuego de carreras al fin y al cabo. Ya todos sabemos de qué va el asunto. Tomas un coche, empiezas una carrera y ya está; este título ofrece algunos cambios empero: puedes recorrer todo Estados Unidos desde Nueva York hasta Los Ángeles, algo que no descarto, toma mucho tiempo; como bien indica el nombre del juego, tienes una pandilla, un equipo con el cual vas a andar hacia todas partes, así que el poder llegar a experimentar muchas aventuras pandi-locas debe comer algunas horas. No obstante, eso no justifica el hecho de que no se pueda analizar de la misma manera de siempre. Si hubieran mandado copias desde hace unas semanas, se hubiera podido arreglar un servidor para que todos los periodistas pudieran ver de qué se trataba todo esto. Aunque claro, algunas veces esos servidores suelen estar arreglados para causar mejores impresiones.

El punto es que este juego es muy distinto a Destiny. Dejando a un lado las diferencias de jugabilidad, Destiny es un juego que prometía una historia épica y todo un universo a ser explorado para descubrir detalles muy profundos del mismo. El sucesor espiritual de Halo nos hacía la promesa de embarcarnos en toda una experiencia única y especial, en donde nos podíamos perder por semanas viendo cada pequeño detalle que ofrecía este juego (Aunque quizá al final no haya sido así). The Crew es sólo un juego de carreras en un mapa gigante.

Sin embargo, quizá aceptaría más esta justificación por parte de Ubisoft si esto o esto no hubiese pasado jamás. La desconfianza, desafortunadamente, ha reinado durante todo este año. El downgrade de inFamous: Second Son, el de Dark Souls II y más tarde el de Watch Dogs (¡Qué interesante coincidencia, otro juego de Ubi!) hicieron que la gente se volviera más paranoica, llegando al punto de decir que juegos como The Division o The Witcher 3: Wild Hunt iban a sufrir el mismo destino. En su momento pensé que era muy extremista esa ideología, ahora presiento que serán muchos más lo que no cumplirán con lo prometido. Uno ya no puede sentir hype gracias a compañías Triple A que sólo están interesadas en el dinero, y a consecuencia de lo que ha pasado con Unity, no puedo si no pensar que la razón por la cual están desprestigiando el análisis de Día 1 de The Crew, es para poder enmascarar el juego lo suficiente como para ganar ingresos y hasta entonces recibir todas las críticas negativas.

Y por si no fuese poco, Ubisoft ha prometido que no cometerán los mismos errores con The Crew que con Unity. Pero me cuesta trabajo creer eso. La confianza es como la virginidad: una vez que la has perdido, no la puedes recuperar jamás. Para la compañía francesa no hay vuelta atrás. Es imposible pensar que este juego no traerá problemas consigo mismo. Estamos hablando de Ubisoft, aquella que retrasó Watch Dogs para que aún así saliera en muy malas condiciones; la que retrasó Unity para “pulir detalles”, pero que aún así, sufrió de bugs muy graves; aquella que retrasó The Crew, pero el cual, estoy seguro, tendrá fallos en sus servidores desde el primer día.

De forma hilarante y preocupante, volvemos a lo mismo de arriba. ¿Me prometen que su siguiente videojuego saldrá en mejores condiciones? ¿A mi qué me importa? ¡Yo quería jugar a Assassin’s Creed Unity, no a The Crew! ACU debió haber salido bien desde el comienzo. Ahora mismo nadie debería estar tratando de compensar nada, y yo no tendría que estar escribiendo este artículo.

Ubisoft: la nueva Atari

Mucho se ha dicho de que Ubisoft es ahora la nueva EA. Pero no. Electronic Arts cuando llego a enfrentarse a un obstáculo -llamado Battlefield 4-, lo supo superar y desde entonces ha sabido adaptarse para poder sobrevivir en la industria moderna. Inmediatamente después retrasaron Battlefield Hardline un tiempo considerable y por lo visto, Dragon Age: Inquisition ha salido excelente, haciendo que mi compañero Ronald le llamase serio candidato a Videojuego del Año. Pero la compañía francesa ha tropezado una y otra vez. En 2012 Assassin’s Creed 3 salió defectuoso y de muy baja calidad, pero no les importó mucho y siguieron trabajando de la misma forma. Assassin’s Creed no se tomó unas vacaciones. Black Flag salió un año después, y aunque éste no tenía muchos fallos, era un juego bastante normalito, ni bueno ni malo; bastante olvidable. Pero lo fuerte viene aquí: Watch Dogs -también de Ubi Montreal-, vio la luz del día unos meses después y fue la burla de muchas personas, y no solamente por su sistema de conducción roto sino también por sus mecánicas genéricas e historia aburrida. Lo lógico era retrasar sus videojuegos grandes para que esto no se repitiera. Pero no. Ahora tenemos a Rogue y Unity, ambos recibidos con muy malas críticas. Oh, y esto parece no terminar. Aunque han dicho que Ubisoft Montreal tendrá más tiempo para desarrollar el próximo AC, se ha dado a entender que otro estudio tomará las riendas para no fallar con la anualización de la saga.

¿Qué rayos estás haciendo Ubisoft?

Hace poco salieron al aire unas confesiones por parte de un ex-empleado de Ubisoft, en ellas, la pobre persona nos decía que desde antes que se empiece el desarrollo de un videojuego, ya hay una fecha de lanzamiento programada y desde el momento se estima cuánto dinero va a generar dicho proyecto. Los empleados trabajan bajo un calendario muy estricto, y si no se quedan horas extra, trabajando hasta 5 horas pasada la hora legal (las cuales no son pagadas, por cierto) simplemente no acaban. El que se retrase un juego, es un milagro para el equipo, pero una desgracia para los 20 trabajadores que tienen que ser despedidos por “falta de presupuesto”.

A Yves Guillemot no le importan los usuarios de PC, según él, el 90% de ellos piratean los videojuegos. Pero no solamente se refiere a los jugadores de esta plataforma. En el fondo, así de bajo piensa de todos los consumidores. A él no le importan sus empleados, o quienes compren los juegos. Él, al igual que todos los ejecutivos de la compañía, solamente están al margen de cualquier forma de ganar dinero. No tratan a sus videojuegos como obras de arte, no tratan a sus empleados como artistas.

Al igual que Atari a principios de los 80’s.

El crash de los videojuegos de 1983 se puede atribuir a muchos motivos. E.T. El Extraterrestre es una de las principales causas. Sin embargo, ese juego tiene un antecedente. Rumbo a finales de los años 70’s muchos ejecutivos empezaron a ver el potencial comercial de los videojuegos, y gracias a ello, fue que empezaron a salir muchísimas consolas por todas partes. Atari cambio de manos y la compañía ahora sólo sacaba ports malos de otros juegos arcade que habían triunfado como Pac-Man o Donkey Kong. Solamente hacían videojuegos para vender y no les importaba en lo absoluto el proceso de desarrollo o la visión artística que el medio necesitaba para poder tener su auge. Es exactamente por estas razones que nació Activision, el primer estudio independiente de la historia. Los fundadores de la actual casa de Call of Duty exigían el ser tratados como artistas, ya que un lugar como lo era Atari, les trataba casi como esclavos. Eventualmente, toda esta ambición por el dinero y la poca importancia que se le daba al diseñador de videojuegos, llevó a la catástrofe que fue el infame juego basado en la película de Spielberg.

Ubisoft se encuentra en la misma situación: lo único que buscan es dinero y han cesado de darle importancia a la persona detrás de la obra. La única y más importante prueba que necesitamos de ello es que despidieron a Patrice Désilets -el creador de Assassin’s Creed– gracias a que él se oponía a los planes de Ubisoft por anualizar la saga.

Felicidades Ubisoft, no eres la nueva EA, eres la nueva Atari. 

“Aquel que no sabe la historia está condenado a repetirla.” – Napoleón Bonaparte