Tengo una especie de relación amor-odio con Rockstar. Lo primero de todo, he de decir que odio plenamente el planteamiento de sus videojuegos por tener tramas desaprovechadas que se degeneran en el “chico de los recados” y por tener una jugabilidad que a veces me puede aburrir por ser tan reiterativa y “Hollywoodense” con esos tiroteos y escenas imposibles. Pero hay veces en las que, por alguna razón alguna, me canso de estar jugando a tanto indie y experimento de narrativa y simplemente quiero sentarme y pasearme por una ciudad llena de oportunidades y actividades.
Con la excusa de que Grand Theft Auto V se está re-estrenando en consolas de nueva generación, y también con el hecho de que mi compañero Ronald ha hecho el análisis de este videojuego ayer mismo, hablemos detalladamente de su sandbox y el mundo abierto que ofrece este título de Rockstar. Hace poco volví a descargar mi copia digital de Grand Theft Auto V porque tenía ganas de explorar Los Santos, y ahora no puedo salir de ahí.
Es curioso, pero si algo aprendí jugando a Watch Dogs, es a respetar el diseño de niveles de la saga de los hermanos Houser. Antes me solía desesperar al empezar un juego de estos porque no tenía absolutamente nada a mi alcance. Todo parecía estar limitado y creía que tenía que completar la historia principal si quería acceder a todo lo “bueno” Pero tras haber recibido exactamente eso en el título de Ubisoft, me he dado cuenta que es una mala idea. Así que he decido volver a darle una oportunidad a este juego un año después de haberlo dejado atrás, y me he tenido que comer mis propias palabras como patatas.
Mantengo mis ideales sobre la historia: la primera parte de GTA V es muy interesante con toda esa trama de Michael y su crisis de mediana edad, Trevor y la emoción-odio que tiene al volver a ver a su mejor amigo y Franklin con… nada. Pero después de un cierto tiempo, este juego se torna en un ciclo infinito de hacer misiones aburridas y repetitivas -menos los robos- y yo como amante de las historias en los videojuegos, me vi afectado por ello a la hora de poder seguir con esta obra. Pero he decidido aprender a sólo hacer las misiones principales como una vía amarga para desbloquear aún más cosas en este mundo increíblemente grande.
Si algo tiene Rockstar, es que ellos saben crear mundos enormes vastamente detallados. Te dan la mano y te preguntan: ¿Quieres venir conmigo? A lo que tú solamente quieres responder que sí. Quieres perderte en ese mundo elaborado y lleno de oportunidades y sueños. Los Santos es una ciudad hermosa, de las únicas ciudades virtuales que te hacen sentir que estás ahí dentro de verdad. Los paisajes, los puentes, las playas, las calles, las casas de Vinewood, el cine, las tiendas, las palmeras y hasta los mismos coches y la gente; el poner una canción de los 80’s en la radio mientras exploras este mundo satírico es todo un placer; es mágico. Jamás me había sentido tan bien viviendo un mundo ficticio. Aunque este juego haya llegado a finales de generación, San Andreas es un lugar cálido que te recibe con los brazos muy bien abiertos, es un lugar del cual no quieres salir por lo increíble que es. Con una gran variedad de localizaciones, es sorprendente que todo esto pueda caber en un disco y sin tiempo alguno de carga.
El tomar un avión o un helicóptero mientras viajas hacia el horizonte con un sol que se está ocultando, originando así una gama de colores que varían entre el amarillo y el naranja; una ciudad que se está preparando para dormir pero que aún tiene mucho que ofrecer en estas últimas horas del día; el simplemente caminar por las calles en la noche mientras ves la lluvia caer y las luces brillar en contraste; el perderte en el condado de Blaine con una moto mientras esperas encontrar señales de vida, algo que en el fondo no te importa porque estás teniendo la experiencia de tu vida porque has encontrado quizá maletines de dinero que conllevan trampas y asaltos; el ir viajando en una bicicleta cuando de pronto te debes detener porque una pobre señora necesita de tu ayuda para atrapar a un delincuente. Quizá la historia principal sea una porquería, pero la pequeñas aventuras que tú vas creando… esas son las que de verdad cuentan en este videojuego. Es extraordinario que absolutamente todo lo que puedes ver, son lugares a donde puedes ir. Si estás en casa de Franklin allá por los suburbios, es posible llegar a esas montañas en el horizonte mediante barco, avión, carro o a pie. Es un universo que te pide que lo explores, pero no te pone condiciones o reglas.
Pero Grand Theft Auto V no sólo es bonito u orgánico, parece que son muchos juegos unidos. Es asombroso que puedas estar cazando animales para más tarde estar en un maratón compitiendo por algo de dinero. O estar jugando tenis para más tarde encontrarte en el cine y salir de ahí para ir a la escuela de aviación. Quizá estés haciendo paracaidismo y más tarde se te antoje ir a un parque de diversiones. Este juego no deja atrás a nadie. Si te gusta algo en un videojuego tradicional, lo más probable es que lo encuentres aquí. ¿Quieres matar? Bien, puedes hacerlo y correr de la policia. ¿Quieres ser un buen samaritano y vivir bajo las normas de la sociedad pero al mismo tiempo divertirte? También es una respuesta válida. Este juego se abre lentamente a ti porque te quiere dar tiempo para exprimir todo el jugo que ofrece esta ciudad. Rockstar verdaderamente es experta en el arte de crear mundos abiertos. No es sorpresa que hasta el día de hoy, Grand Theft Auto siga siendo un referente para hacer un sandbox, pues es el que mejor hace estas cosas, el que prácticamente inventó el género; el que lleva más de 17 años creando ciudades y mundos enteros. Dígase Los Santos, Vice City o Liberty City, los hermanos Houser siempre han sabido cómo mantenerse relevantes y frescos con cada entrega que sale de esta magnífica saga.
Puede que tenga sus errores narrativos -algo que no debemos negar- pero si dejamos eso a un lado, Grand Theft Auto gana muchísimo. Todas sus virtudes disfrazan lo que puede que esté descuidado, y no es que sea algo totalmente negativo. Antes odiaba esta saga, pero debo admitir que me ha seducido. Me he vuelto un amante de estos videojuegos gracias a sus mundos abiertos y oportunidades infinitas. Para crear un paralelismo con el mítico 1984, se puede decir que al final, yo he terminado por obedecer a esa fuerza omnipotente que controlaba a todos los jugadores; al final, he terminado por amar a la Gran Rockstar.
Kalistaaaa
Rockstar gusta hasta al que no ha jugado a videojuegos, tiene una magia especial que hace que te enamores de sus ciudades, enternos y épocas recreadas. SON UNOS GENIOS!!1!
Ander H.
en todo sandbox tienes que ser un pco “chico de los recados” para algo estan las misiones y si el mundo es abierto pues tendras que recorrerte el mapa… skyrim, fallout, mafia, piensalo.
Luis León
Es un modelo nada imaginativo. Es fácil de hacer y muy típico. Se puede romper con ese tipo de diseño y hay muchos ejemplos claros. Por no ir lejos: Grand Theft Auto V en su primer tercio es emocionante y variado, pero a partir de ahí decae mucho en su historia.
CelScipt
Desde que he completado GTA V, siempre me ha dado la sensación de estar en interactuando en una serie-b interactiva y para el presupuesto que maneja, quizá no sean tan talentosos con la narrativa y el tetrismo lo pongo en duda, tiene sus innovaciones, pero en mi opinión no me parecen supremos y con esto son los ”mejores”.
Luis León
En lo que es la narrativa tradicional, GTA nunca me ha llamado la atención. Pero a la hora de dejarte crear tus propias historias, es ahí donde me logra conquistar. Tampoco creo que sean lo mejor de lo mejor. A la hora de hacer un sandbox, me gustan mucho y reconozco y estoy de acuerdo con el hecho de que sean un referente. Pero si hablamos del Verdadero Sandbox, entonces me quedo con Minecraft.