Recordando viejos tiempos | Zelda Ocarina of Time | Nintendo 64

Tras haber vivido el año del mundial 98 en el que Francia se alzó victoriosa, en el que Pixar nos maravilló una vez más con el estreno de Bichos y fuimos capaces de teletransportar nuestro primer átomo; no se me ocurre mejor forma de terminar el año con el estreno del que, para muchos, es el mejor juego de la historia: Zelda Ocarina of Time.

Siendo este el primer reportaje que hacemos en GamElegant de este tipo os merecéis que os demos una pequeña explicación. Los próximos párrafos no están destinados a hacer  una crítica del juego como si nos encontrásemos en el 98 ni quiero que penséis por un momento que será de forma objetiva. Estamos en el 2014 y se hablará de Zelda como lo que es, una leyenda entre leyendas, como observareis me es difícil no ser algo subjetivo ante algo que me encanta de sobremanera. Empecemos.

Puede que los que os digan que el 98 es una época dorada para el mundo consolero no anden muy desencaminados, por aquella época jugábamos a los grandes como el Pokémon Rojo/Azul, Soccer`98, Tekken 3 y Metal Gear Solid entre muchos otros. En este campo de lucha entre  colosos que inundo 1998 nació Ocarina of Time. Sumándose a esta situación también tenemos que añadir la responsabilidad que cargaba sobre su “estuche”y es que todos los juegos citados, excepto Pokémon, son multiplataforma y Zelda es un exclusivo de Nintendo, esto recuerda a lo ocurrido dos años antes con Mario 64 que elevó a la Nintendo 64 a lo más alto del podio. Pero las cosas habían cambiado, Sony pegaba fuerte con su Playstation y juegos como Metal Gear Solid o Gran Turismo. Nuestro adorado Link tenía la misión de devolver a Nintendo su medalla de oro. Que lo consiguiese o no es ya una opinión de cada uno pero hay que destacar dos cosas, sin el dulce sonido de la ocarina la situación de Nintendo sería diferente en la actualidad probablemente y la segunda es que Ocarina of Time se hizo un hueco en la historia.

De cara a los que nunca hayáis manejado a Link y os pique el gusanillo después de leer este escrito, quizás os apetezca saber de antemano como funciona, a grandes rasgos, esta aventura. Nuestro protagonista es un pequeño niño que ha crecido en el bosque Kokiri, donde empieza nuestra aventura y a fraguarse una leyenda. El argumentocomienza cuando a Link se le concede su hada, Navi, y se le ordena ir a hablar con el alma del bosque, el árbol Deku. Tras la primera pequeña aventura dentro de sus entrañas, se te concederá la gran responsabilidad de salvar al mundo.

A estas alturas va siendo hora de que os hable de las mecánicas del juego, de cómo funciona y de las innovaciones que nos trajo al mundo del videojuego en su momento. Muchas de las características que podemos ver en juegos actuales de este género, aventura-acción, están basadas en las mecánicas del Ocarina, este fue el primero. Nos encontramos por primera vez con usos múltiples de los botones de nuestro mando dependiendo de la situación, hablar saltar o pelear por ejemplo. También nos encontramos por primera vez con la posibilidad del apuntado automático que tanto apreciamos en juegos como Kingdom Hearts, la utilización de la cámara es sobresaliente, intentando darle trazas cinematográficas en momentos puntuales o pasando de la cámara en tercera persona a la primera cuando apuntamos con armas de largo alcance como el arco o el tirachinas. Pero lo que más debería destacar es algo que le ha aportado sus 16 años de vida, Zelda Ocarina of Time es un juego difícil al más puro estilo de la vieja escuela, sin ayudas para saltar con enemigos complicados con puntos débiles que te obliga a descubrir. Nadie te dice nada te lo tienes que sacar tu solo, tu perspicacia se pondrá a prueba, y si piensas que tu hada Navi en algún momento te dará buenos consejos es que aún eres muy iluso. Esto, aunque pueda echarte para atrás en la cuestión de jugárselo tras años de avances en los videojuegos, te tiene que atraer aún más. Podrás probar, si eres un jugador joven, como se jugaba antes de que los diseñadores nos lo diesen todo masticado.

Después de comentar su historia y jugabilidad, toca hablar de lo que hace que este Zelda sea algo mágico: su diseños. El arte plasmado en cada rincón del mapa conforman un entorno mágico e inolvidable. Nos encontraremos pueblos, una gran ciudad con su catedral incluida, un cementerio, un volcán, cuevas de hielo, lagos y la lista no se termina. Todo solucionado técnicamente de forma magistral, tanto que compitieron con todos los juegos del momento a pesar de usar el mismo motor gráfico utilizado dos años atrás en Mario 64. Tal fue la obsesión de Eiji Aomuna, el creador del juego, que incluyó por primera vez el ciclo día/noche, afectando al juego al juego a la hora de poder hacer o no ciertas misiones dependiendo del momento del día en el que nos encontremos. Aparte del aspecto visual, una de las cosas que más destacó en el juego fue la excelente BSO, la cual te aseguramos que no pararas de tararearla después de cada partida.

Todos estos elementos técnicos es cierto que los podrás ver en una infinidad de juegos pero en este caso todos están entrelazados y encajan a la perfección como pocos lo han conseguido, todo tiene sentido y hace que nos transmita la historia como un cuentacuentos que narra los relatos con su alma.

La razón principal de que exista este texto es que los que en su momento tocaron la ocarina, vuelvan a entonar su melodía y los que nunca lo han hecho que lo intenten, valdrá la pena el esfuerzo.