Naufragando en los videojuegos puros independientes

Cuando hablamos de un videojuegos ”indie”, se nos viene en mente, juegos populares como: Journey, Braid, Lone Survivor o Limbo. Pero ¿Qué os parece profundizar mucho mas? Hay obras completamente desconocidas y por lo tanto obscuras que no llegan al publico, porque son unos pocos quienes hacen estas obras, pero no se dan a conocer, ejemplos varios como: A classical Survival Horror, In to the dark, Survivors o DreadOut, que forman parte del puro anonimato y que son sucedáneos a ser infravalorados, por la gran audiencia.

Pero llevemos este tema al extremo. Muchos consideran que no hay ”juegos buenos” por ser ”indies”, del mismo modo podemos pensar que los ”indies” no destacan en la audiencia, porque se valoran otros factores, desde el punto de vista artístico de la obra hasta la forma jugable, pero esto no son mas que minucias que unos pocos no toleran, porque se auto-determinan como ”productos de entretenimiento”. Tenemos esta clase de juegos que están disponibles al publico, pero no lo quieren dar a conocer, en ocasiones estas obras pertenecen a ese vacío y no se dan a conocer, porque los propios autores tiene una autentica obra personal entre sus manos. En este naufragio se encuentran desarrollos por no-profesionales y a veces no se dan a conocer, porque su registro es limitado y porque en muchas ocasiones, no pueden poner en venta estos auténticos juegos independientes, por las acciones legales, entonces ya no pasan a ser productos en un sentido comercial, si no en pequeñas historias que se evaporan con el tiempo, ahí nace realmente la indepencia de estos juegos, que en ocasiones suelen verse limitados por su diseñadores y no necesariamente son vendidos al publico, incluso no obtienen un medio de financiación, ya que cualquier con unos conocimientos básicos puede llegar a realizar dichas obras.

Pese a todo, esta clase de juegos tratan de ser experimentales, diseñados por autores que les apasionan realmente este medio y no como una oferta y demanda, porque con trabajo y esfuerzo, no esperan a que otros autores lancen su mensaje, si no ellos mismos quienes lo hacen. Una proeza, digna de elogio que esta alcance de todos y que pocos se atreven a llevar este amor hasta las ultimas consecuencias. Sin embargo, aun le ponemos baches a esta clase de obras. La creencia popular que rechaza esta clase de obras, precisamente por lo que no logran los juegos con financiación o simplemente de los poderosos Triples A, porque en conjunto se crea una distancia, sobre su trabajo, diseño y expresión artística que suele estar ligada a la programación que ha sido diseñada, en cambio ganamos en personalidad, en ideas propias y a veces en auténticos ejemplos de independencia global y pese a que la ”pescadilla” es no valorar dichas obras, pierden su valor con el paso del tiempo, si bien considero esta clase de juegos, como auténticos ”indies”, porque buscan hacerse un hueco, no mediante el lucro, si no mediante la expresión de su autor, eso amigos vale mucho mas que 100 Destinys, eso esta mas que garantizado.

Este mercado aunque no este disponible a la venta, debe continuar, debe permanecer, no solo por aquellos que realmente amamos este medio, no solo por dar a conocer pequeños diseñadores creativos que han puesto su grano de arena, esto se lleva mas lejos, es un trabajo humilde, una expresión real, y donde muchos de estos autores, no dejan de ser corrientes en el mundo real. Dichos autores, representan en mayor grado que los juegos independientes, son aquellos que tratan de hablar, comunicar y trasladar sus pensamientos aquellos quienes juegan, puede que algunos no gocen del espectáculo que muchos apremian, pero ganamos en obras, que se han hecho por sus propios medios, por su propio trabajo y luego es trasladado a su pensamientos al pixel (un buen recuerdo retro, pero actualizado), porque la gran mayoría serán anónimas, algunas quizá no podrán venderse y otras simplemente no las conoceremos, porque están instaladas en un ordenador, pero esas personas existen, esta clase de videojuegos son reales y cualquiera que tenga un mínimo de conocimiento, un mínimo de información sobre este tema, pueden iniciarse, quizás no en un sentido ”profesional”, pero sus trabajos, si podrán a darse a conocer, si se aplican suficiente, pese al esfuerzo y tiempo que requiere.