Un dilema al que deben enfrentarse las desarrolladoras
Desde siempre se ha hablado de la dificultad de los videojuegos y ante este tema siempre surgen muchas opiniones diferentes, en este caso, el videojuego protagonista es Sekiro.
La mayoría de los videojuegos dejan al jugador elegir la opción de dificultad que más se adapte a la forma en la que quieren jugar, pero muchas veces aún eligiendo la dificultad o se pasa de fácil o se pasa de difícil. Por lo tanto, ante esto siempre surgen una inmensidad de opiniones.
Ante la nueva creación de FromSoftware “Sekiro”, se ha hablado de que su dificultad es extrema, por lo que para muchos esto supone un gran problema y deciden no comprarlo por esta razón. ¿Deberían las desarrolladoras plantearse esto?
Sekiro no plantea ni siquiera la opción de elegir dificultad y el hecho de que no tenga multijugador hace que nadie te pueda ayudar, como pasaba en el Dark Souls o en Bloodborne, esto significa que el haber jugado a estos juegos mencionados no significa que Sekiro se te vaya a dar bien, tienes que adaptarte a él y aprender a jugar de nuevo y sobre todo aprender a llevar bien las continuas muertes.
Mucha gente está decepcionada al no encontrar lo que esperaban. Está claro que para las personas que buscan experiencias nuevas y extremas, este es su juego, pero hay muchos otros que no buscan esas experiencias y prefieren ir pasándose juego tras juego sin ningún tipo de dificultad, para ese tipo de jugadores ese es su disfrute y hay que respetarlo.
No hay una solución clara ante esta dualidad, simplemente hay que aceptar que unos juegos sean de una forma y otros de otra y tú como jugador tienes que elegir a lo que quieres jugar, si te parece muy fácil o muy difícil, puede ser que ese no sea tu tipo de juego y así poco a poco irás encontrando el juego perfecto para ti.
Y tú, ¿Qué opinas?