Impresiones The Order 1886

Otro de los grandes títulos de la feria madrileña celebrada el pasado fin de semana fue The Order 1886, el exclusivo de PS4 al que se le dedicó una habitación con seis consolas a disposición. La cola para probar la demo de unos 20 minutos era realmente agotadora, en lo personal fueron casi cuatro las horas que tuve que esperar. Sólo cabe preguntarse si valió la pena el tiempo gastado en esa interminable fila, intentaré dar una respuesta a esa pregunta con estas impresiones del que posiblemente sea el juego exclusivo de Sony más importante del año venidero.

Lo que fue jugable en ese stand es lo que ya hemos visto hasta la saciedad de este juego, esa parte del tercer capítulo en la que uno de nuestros compañeros recibe un disparo y tenemos que arrastrarlo hasta una casa. Pero no adelantemos acontecimientos, lo aplaudible del título es que es el único programa que he jugado en la feria en español, y no solamente en español pues había una gran lista de idiomas a elegir, lo malo es que no teníamos a nuestra disposición cascos lo que significaba que oír íbamos a oír poco. Se nos hacía un rápido tutorial con varias pantallas en las que se nos indicaban los controles básicos, tomar cobertura o el raro funcionamiento de la más que curiosa arma principal del juego. Primero disparabamos una especia de polvo y después una bengala que prendía fuego a nuestros contrincantes, esto fue una de las cosas que más nos gusto. Un arma fuera de lo común y muy divertida de usar, pese a que los enemigos fuesen fáciles de matar y ciertamente bastante tontos, incluso con algunos fallos de IA y no solamente de eso; la demo tenía problemas también en físicas y ciertos tirones aunque hay que reconocer que en lo gráfico es de lo mejorcito.

Los puntos malos es que la demo era muy corta, se acaba cuando parecía llegar lo mejor y te deja con ganas de más, aunque esto no reprime mi pensamiento de que a The Order 1886 le recubre una capa de humo de un tamaño similar a la que recubre Assassin’s Creed Unity. Sony intenta vendernos esto como un TPS revolucionario, como el Gears of War de la octava generación, la perfecta simbiosis entre lo jugable y lo cinemático, y eso muchas veces no queda en nada más que palabras. Al fin y al cabo es un shooter en tercera persona más, no tiene nada que en lo jugable resulte innovador y se centra en el cobertura, disparar, recargar que ya estableció el mencionado Gears of War. Sí es cierto que hace buenas transicciones entre lo jugable y lo cinemático, pero tampoco es nada espectacular solamente una manera más fluida y vistosa de hacer las cosas, además la tasa de frames se resiente en estos cambios lo que evidencia el fallo y resta inmersión. Esperemos que los fallos en lo técnico se corrijan en estos meses que quedan hasta que llegue el 20 de febrero y lo tengamos en la tienda, pues de lo contrario uno de los principales pilares del título se vería muy resentido.

Para dar una conclusión a estas impresiones he de reconocer que The Order 1886 es un buen juego, tal vez no parezca por esta demo ser lo que nos vendan, pero es un buen juego. Divertido, aunque poco innovador. Con una ambientación fantástica y unas armas más que llamativas acompañado todo ello por unos gráficos de verdadera octava generación que se orquestan con un juego entre las escenas CGI y las secuencias de gameplay. No podemos efectuar un juicio total a partir de una demo de 20 minutos, pero si el juego final es una extensión de lo que encontramos en la mayor feria española de videojuegos a nivel nacional está claro que nosotros bajaremos nuestras expectativas para intentar no quedar decepcionados, de hecho personalmente ya lo he hecho. The Order 1886 va a ser un gran juego, pero no es el juego vende consolas que Sony pretende que sea, no es un The Last of Us, es un buen TPS, pero un TPS más.