Impresiones Far Cry 4

Otro de los grandes atractivos de la Madrid Games Week era Far Cry 4, dispuesto en el stand de Sony, con varias consolas a nuestra disposición y un empleado informándonos sobre las novedades y el funcionamiento del título. Lo que es jugable en la feria madrileña es básicamente lo mismo que ya hemos visto con anterioridad en otras demos, durante esta demostración tendremos que liberar una fortaleza y para ello podremos hacerlo de las tres famosas maneras que ya nos han dicho hasta la saciedad: sigilo, aire o a lomos de un elefante asesino. Nosotros hemos jugado una vez de cada forma y esto es lo que nos ha parecido:

En primer lugar optamos por la vía del sigilo: cuchillos arrojadizos, una ballesta y un rifle de francotirador eran nuestros métodos de ataque, accedíamos a la base escalando de una forma novedosa en la franquicia, pues recordemos que ambientarse en un lugar tan montañoso es sinónimo de introducir una verticalidad en el título que se hace patente. El planteamiento de la base es idéntico que en Far Cry 3 y son pocas las novedades si decidimos realizar la liberación de incógnito. El objetivo es matar a todos los enemigos, si nos descubren pedirán refuerzos por radio y si queremos evitar esto podremos acercarnos a los puntos de llamada para deshabilitarlo o romperlos uno a uno. Concluir la liberación sin que nadie nos detecte es tan satisfactorio como lo era en el último Far Cry, y si nos descubren las cosas se pondrán complicadas pues aunque a la IA le queda algo que mejorar saben defenderse y atacarnos de manera efectiva. Por suerte contábamos con tres jeringas con las que curarnos de igual manera que en Far Cry 3, si las agotábamos la curación tardaría más y sería menos efectiva.

Tras terminar de probar la vía del sigilo con resultados irregulares, liberamos la guarida pero nos pillaron y hubo que matar también a los refuerzos, nos decidimos a atacar por aire y dejar al elefante como última alternativa. Aparecíamos con un girocóptero justo delante nuestra dispuesto para ser pilotado. Nuestras armas principales esta vez eran un lanzagranadas y una ametralladora con silenciador. Esta opción es la que nos pareció más fresca de las tres, cada una tiene su encanto por lo que no me mojaré a decir cual es la que más me gustó pero hemos de reconocer que liarse a tirar granadas desde un helicóptero es una opción tan divertida como viable. El manejo del vehículo es sencillo, no tardaremos en adaptarnos y en desear empezar a causar estragos en la base rival. El ataque desde arriba es algo novedoso en la serie y que creemos que le sentará muy bien aportando un plus respecto a Far Cry 3, pues el juego es muy continuista como ya ha quedado patente durante el presente artículo. Fue inevitable que llamasen por refuerzos, que nos quedásemos sin munición y que tuviésemos que terminar la liberación desde el suelo, pero el viaje aéreo es algo que francamente he de repetir. Una pena que no pudiésemos probar más vehículos, pues el transporte en diferentes medios promete ser aquí incluso más importante que en la tercera entrega.

 ¿Y para el final qué? Dejamos lo más bombástico, entrar por la puerta grande a la base sentados a lomos de un elefante, ahí es nada. Cuando se mostró esto por primera vez causo una reacción más que interesante y es que no es para menos, pocos juegos hay en los que podamos hacer esto, es algo totalmente novedoso… o no. Ciertamente el elefante recuerda sobre manera a los dragones de Far Cry 3 Blood Dragon, está bien aquellos no se podían montar, pero la idea es la misma hacerlos entrar en la base y que arrasen con todo, tal vez no sea tan innovador como a simple vista parece pero lo que sí es, es tan divertido como sí parece a simple vista. Entrar a balazo limpio en Far Cry 3 era genial, hacerlo en Blood Dragon con la compañía de una dragón era aún mejor, pero hacerlo sobre un elefante mientras vamos armados con una ametralladora ligera y una recortada es mejor todavía si cabe. Una opción muy gratificante, aunque trágicamente yendo por está vía fue por la única que no pude liberar la guarida. Para ayudarnos a causar la total destrucción además del elefante teníamos dispuestos por el escenario morteros o ametralladoras fijas que podían usarse en nuestro beneficio o perjuicio, además los enemigos de forma inteligente montaban las ametralladoras de los vehículos para intentar acabar con el elefante lo más rápido posible.

Con todo esto podemos decir que Far Cry 4 es a priori un programa muy continuista respecto al 3, pero ¿para qué cambiar algo que ya funciona? Se le ha añadido al título suculentas mejoras que harán las delicias de los jugadores que disfrutamos con su antecesor. Con ello Ubisoft consigue tener una de las más interesantes propuestas para lo que queda de año y para lo que será el periodo navideño. A mi me ha convencido, falta ver si a vosotros también, para poder hacerlo será necesario que os paséis por la Madrid Games Week.