Desnuda a los videojuegos

La experiencia no se rige únicamente de errores, a veces son los aciertos quienes unen a los jugadores. En la presente crisis hemos contemplado como la crisis financiera a engullido a innumerables empresas, nobles trabajadores y emblemáticos estandartes de la industria del videojuego como el caso de THQ & LucaArts. Pese a todo este recorrido no ha servido de mucho y es para darnos cuenta de la situación mas grave que corre este medio: Creativos fijan sus fechan sus juegos, presupuestos que quitan el hipo pero derroche sin igual, problemas internos que intensifica la idolatracion y odio de los fans a otras marcas o productos, todo esto:

¿Para que?

Es cierto que valoramos los videojuegos como un medio interactivo, productos de entretenimiento, que sirven de lucro para ciertas franquicias que sobreexplotan las sagas a base del dinero del fanservice, para mayor inri nos volvemos selectivos, análiticos si lo prefieren sobre nuestros gustos, mientras las creaciones mas vistosas son aquellas que ejercen cierto poder audencia.

Si miramos en profundidaz la industria esta mas presente la censura, medios de comunicación ya se han hecho eco, donde predomina la publicidad del producto, aunque luego sea mediocre y una evidente escasez de inspiración porque logre profusión de ventas. Y lo peor no reside en este acto, si no somos nosotros los jugadores somos permisivos ante las malas prácticas, sin importar a quienes se lleven por delante, lejos de tomar alguna solución o de tomar un liderazgo, nos quedamos frente al ordenador, obligados a pensar de manera similar a otros, por temor a los reproches (con su distancias, por supuesto).

Ahí radica el problema. Si una marca nos posee, permitimos sus errores, si un juego comete malas prácticas no lo discutimos solo tratamos que otros no hablen del error, eso sucede frecuente en foros, ¿Es negativo opinar de forma diferente?, eso nos lleva al siguiente modo de enfocar los métodos ”productivos” que muchos tratan de ocultar. Los videojuegos son un negocio lucrativo, sus pretensiones son evidentes, hoy día es mas facil que se anuncien el contenido descargable o la secuela, si tomamos como referencia que ninguno no ha salido al mercado y que el publico esta dispuesto a pagar, es que algo falla, porque no somos: ”Vacas lecheras que puedan exprimir nuestro la leche” si bien esta frase es significativa en este caso.

¿Podemos hacer frente a los problemas de la industria que vive actualmente?

Como consumidor te has visto afectado, incluso a veces, ”obligado” hacer una compra que viene en un disco. Este es una forma de ver, como están empezando a funcionar ciertos juegos en diversos sistemas y en el caso de Nintendo es opaco -al menos por el momento- de estos sucesos, que siguen presentes en nuestros días, pero que miran con optimismo a los jóvenes gamer una lindeza habitual en el mundo empresarial, utilizar un marco bonito del que todos pretendan verse reflejados, pero como sucede en el mundo de los negocios, quizás tu dinero vaya a parar a mejor lugar innecesariamente. Nosotros como consumidores podemos hacer frente a este problema, que tenemos de frente, ya no solo las artes que se utilizan.

Han pasado muchos años desde las primeras consolas, el pensamiento arcaicos de que: “En el pasado se hacían juegos con mimo”, no se discute, pero el rumbo que estamos llevando y que unido a la frase anterior, bien podemos considerar que los videojuegos, son un modelo rentable, el cual permitimos errores si un logotipo nos gusta y que el amor a ciertos sistemas, nublan la conciencia, no creo que seamos ”ovejas de un rebaño”, debemos tomar una actitud y determinación para cambiar estos aspectos de los videojuegos, que hoy por hoy, no son nada alentadores y que ponen en riesgo de tomarnos en serio como medio de comunicación, ya que las adquisiciones que hagamos en el presente, el futuro se verá reflejado.

Hemos cometido muchos errores en el pasado, no volvamos hacerlo, así no tendremos que pagarlo en el futuro. Tenemos una responsabilidad, todavía queda tiempo para frenar estas malas prácticas.