La consultora Simon-Kucher and Partners señala en un informe que un 35% de la población de jugadores poseen al menos una suscripción de juegos
El auge de los modelos de suscripción durante la última generación de consolas es algo innegable. Gracias al nacimiento de servicios como Xbox Game Pass o xCloud. O la aparición de propuestas recientes como Google Stadia y el futuro Amazon Luna, entre otras opciones.
Una serie de productos que han sido acogidos por al menos un tercio de los jugadores de todo el mundo, según un informe reciente. La consultora Simon-Kucher and Partners ha realizado un análisis de mercado en torno a las suscripciones de videojuegos, según informan en Games Industry.
Con una muestra de más de 13.000 jugadores, procedentes de 17 países diferentes, y realizada entre mayo y junio de este año, el informe afirma que un 35% de los jugadores poseen un servicio de suscripción en activo, con un reparto desigual por segmentos. El 61% de los jugadores “hardcore” (más de 20 horas semanales) poseen alguna suscripción, frente al 27% de los jugadores “casual” (menos de 5 horas semanales).
Más allá de este detalle, el informe profundiza también en los motivos principales por los que los usuarios eligen un servicio de suscripción concreto:
De los usuarios que ya tienen alguna suscripción, el 80% de ellos afirman que, o bien poseen más de una suscripción activa (el 9%), o están interesados en tener más de una (71%).
Sobre los motivos, la mayoría de los encuestados con una suscripción previa mencionan que la calidad de los juegos ofrecidos es el factor más importante.
Por detrás de ello, sus motivos principales son el precio, seguido por el número de juegos, y la variedad que ofrecen dichos juegos.
En cambio, aquellos que no cuentan con suscripciones mencionan que el factor más importante para ellos es el precio, seguido por la preferencia de poseer los juegos frente a depender de una cuota para acceder a ellos, como un alquiler.
El informe indica también que los jugadores con una suscripción invierten más horas de juego que aquellos que no las poseen, algo que ya destacó Microsoft en el pasado al hablar sobre el efecto de Game Pass en sus usuarios.