Blizzard ha zanjado el debate cambiando la pose en la que Tracer nos mostraba su retaguardia
Hace varios días, Overwatch se hizo mucho eco en internet debido a un polémico cambio en una de las poses de victoria de Tracer, uno de los personajes jugables del nuevo shooter multijugador que está desarrollando Blizzard. En su pose inicial, Tracer era considerada como “demasiado sexualizada” por varios fans del juego, y tras las quejas de varios de estos fans (Entre los más sonados, un padre de una niña de 11 años que se preocupaba por lo que vería su hija) y varias decisiones internas, se decidió eliminar la pose para reemplazarla por otra. Esa pose sustituta ha sido revelada hoy mismo y parece estar basada en antiguos posters “pin-up” de los años 50.
Aunque la controversia se ha hecho sonada debido a la acción de varios fans, que pensaban que el movimiento de Blizzard era para conseguir un efecto de ser “políticamente correcto”, el director del título, Jeff Kaplan, ha salido a la palestra para aclarar el malentendido. La eliminación de dicha pose no era ningún movimiento de censura ejecutada por un tercero externo al desarrollo del juego, y fue decisión propia y personal del director mismo. Su razonamiento consiste en que cree que esa pose no llegaba a añadir nada de relevancia al personaje, era aburrida y que en parte se contradecía con el espíritu que querían que Tracer mostrara, de ello la verdadera razón de su sustitución por una nueva pose.
A pesar de esto, Overwatch sigue siendo uno de los juegos multiplataforma y del género shooter más esperados del año, y muchos fans siguen esperando su estreno fechado para el próximo día 24 de mayo de 2016.