El trastorno del videojuego se ha añadido a la sección relativa a trastornos de adicción
La Organización Mundial de la Salud ha reconocido el hecho de jugar a videojuegos, como una adicción, un problema de salud mental que tiene lugar al adoptar ciertos comportamientos ante el entretenimiento interactivo. De hecho, la OMS lo compara con otros trastornos como por ejemplo, las apuestas.
El trastorno del videojuego se ha añadido a la sección relativa a trastornos de adicción.
Con esas palabras se oficializó la inclusión de la adicción al videojuego como una afección más de la Clasificación Internacional de Enfermedades, que se llevará a la 72º Asamblea Mundial de la Salud prevista para mayo del 2019 para su adopción por los Estados Miembros, entre los que se encuentran España, entrando en vigor el 1 de enero de 2022.
¿Quién es adicto?
El patrón de comportamiento que debe tener una persona adicta a los videdojuegos según registra la OMS en su página web se basa en tres tendencias.
- Quien demuestre una discapacidad de control en cuanto al juego, como la frecuencia de juego o no tener la habilidad o determinación para parar de jugar.
- El jugador da más prioridad al videojuego que a otros elementos de su día a día, afectando a su vida diaria.
- El trastorno con los videojuegos no cesa, sino que continúa y crece a pesar de las consecuencias negativas.
La propia OMS dice que esta no es una adicción común. En una entrevista con CNN, Vladimir Poznyak, del Departamento de Salud Mental y Abuso de Sustancias de la OMS, dice:
Millones de jugadores alrededor del mundo, incluso cuando se aproximan al gaming intenso, nunca podrían ser calificados como personas perjudicadas por un trastorno del juego.
Os recordamos que la OMS anunció en diciembre la intención de incluir la adicción a los videojuegos como problema mental, aunque ciertos científicos se oponían a ello. El nuevo epígrafe del listado de enfermedades y trastornos de la organización lo ha acabado incluyendo, actualizándolo así por primera vez en 18 años.