Si ayer os contábamos que durante la Blizzcon se había presentado Starcraft 2: Legacy of The Void, hoy le toca el turno a una nueva IP que probablemente nadie se esperaba que presentase Blizzard. Quizás se están dando cuenta de que para reinar en el sector de los videojuegos a veces hay que apuntarse a modas que ya están triunfando como el caso de los MOBA (Heroes of the Storm), los juegos de cartas (Hearth Stone) y ahora los shooter en primera persona (Overwatch). Lo que está claro es que con su peculiar estilo, seguro que Blizzard consigue darle el toque de magia y frescura que le hace mucha falta al género.
Overwatch nace de las cenizas de Titan, un MMO que fue cancelado después de casi 7 años de desarrollo y que ha inspirado a este nuevo título. Overwatch se presenta como un FPS (first person shooter) con un estilo desenfadado que nos recuerda inevitablemente a Team Fortress 2, el juego de Valve que el pasado año consiguió facturar 139 millones de dólares. ¿Serán esos ingresos precisamente lo que busca Blizzard con este nuevo juego? Pues, según Mike Morhaime, CEO de la compañía, el objetivo va más allá y define la meta del juego como la de “llegar a una audiencia más amplia, uniendo la acción y profundidad que adoran los fans del género“.
Por ahora sólo ha sido anunciada la versión de PC, aunque viendo que Diablo 3 al final llegó a las consolas, y dado que todo shooter que pisa el mercado acaba saliendo para las máquinas de Sony y Microsoft, no nos extrañaría que hiciesen un port en el futuro. Tampoco ha sido anunciado el modelo de juego, no sabemos si habrá suscripción mensual como en World of Warcraft o será Free to Play (lo más probable) como Hearthstone, lo único que tenemos claro por ahora es que los jugadores de PC podrán disfrutar de su beta en 2015 y, según Blizzard, “el juego está mucho más cerca de salir de lo que imaginamos“.