¿Qué tienen en común dos títulos como Crysis 3 y Ryse: Sons of Rome obviando el hecho de que pertenecen al mismo estudio? Ambos son un portento gráfico, pero fallan en otros aspectos igual o más importantes. Desde Crytek saben que uno de sus puntos fuertes consiste en optimizar al máximo su motor, el Cry Engine, para obtener un detalle asombroso en todos sus títulos.
La parte negativa para Crytek del asunto es que cada vez es más difícil que la gente alucine con los gráficos de sus juegos viendo que otras compañías consiguen resultados similares en lo referente al aspecto gráfico y que en historia o jugabilidad les pasan por encima. Nicolas Schulz, el ingeniero de renderizado de la compañía, comentó lo siguiente sobre el tema:
“Pienso que con los avances en calidad de materiales, iluminación y calidad de animaciones faciales la versión de PC de Ryse ampliará los límites de los gráficos en tiempo real un poco más. En general, al contrario de lo que pasaba en los tiempos del primer Crysis, hemos conseguido un nivel en el que es complicado sorprender a la gente. Dicho eso, hay áreas que explorar en las que definitivamente se cambiarán los límites tanto como sea posible”