Disponible desde el 26 de mayo de 2020 en Xbox One, PlayStation 4, Nintendo Switch y PC
Es indudable que Minecraft se ha convertido en uno de los videojuegos más conocidos de la actualidad. Es difícil imaginar algún dispositivo o plataforma moderna que no albergue alguna de las diferentes versiones de este peculiar universo cuadriculado. Aprovechando su éxito, Microsoft y Mojand Studios han querido darle una vuelta de tuerca más a la franquicia, para alcanzar nuevos horizontes todavía inexplorados por la serie. Así nació Minecraft Dungeons, un RPG de acción, similar a lo visto en la saga Diablo, en el que se han simplificado la mayoría de los conceptos básicos del género.
La idea es resultar accesible para el público en general, incluso aquellos que no estén familiarizados con este tipo de experiencias. Partiendo de esa base, sus creadores han desarrollado un título que hace de la sencillez su principal virtud, ofreciendo diversión directa y sin complicaciones. Aquí no vais a encontrar complicados menús ni decenas de opciones entre las que elegir, pues tiene un enfoque mucho más simple y accesible del habitual. ¡Es el momento de blandir nuestra espada y luchar contra los opresores del reino! ¿Me acompañas?
Espada y brujería
La historia no pasa de ser una mera excusa para darle a los aficionados un motivo por el que embarcarse en esta aventura, pero es de agradecer que tenga, al menos, un pequeño trasfondo narrativo. La trama nos habla de un maldeano, el cual es marginado y repudiado por sus congéneres. Lleno de rabia, camina sin rumbo fijo por el mundo… hasta que casualmente encuentra el orbe de la dominación, un extraño artefacto mágico que le confiere increíbles poderes. Ahora, trasformado en el poderoso Archimaldeano y con un implacable ejército bajo su mando, pretende someter a todos los que se opongan a su reinado de terror.
Aquí es donde nosotros entramos en juego. Lo primero que haremos será elegir un avatar que nos represente, entre un conjunto de posibles candidatos. Esta elección se hace únicamente con fines estéticos, pues en Minecraft Dungeons los personajes no pertenecen a una clase predefinida. Lo que marca la diferencia son los pertrechos que nos equipemos. Desde un sencillo menú, podemos seleccionar un arma cuerpo a cuerpo, otra a distancia y una armadura. También hay tres huecos para colocar artefactos que nos confieren distintas ventajas, que van desde lanzar flechas explosivas, hasta invocar criaturas que nos ayudarán a vencer a los enemigos.
Cada vez que subimos de nivel, seremos recompensados con un punto de encantamiento, los cuales sirven para desbloquear habilidades especiales con las que potenciar las armas y la armadura. Este sistema de progresión no es nada complejo, ya que nos permite potenciar nuestro instrumental sin preocuparnos demasiado por las repercusiones a largo plazo. Si pasado un rato encontramos una pieza de equipo de un nivel superior, podemos desmontar la que hemos portado hasta ese momento sin muchos miramientos. Al hacerlo, recuperaremos los puntos de encantamiento que hayamos invertido en ella y los tendremos disponibles para usarlos donde nos parezca más adecuado.
‘Minecraft Dungeons’ se disfruta mucho más en compañía
Como buen representante del género dungeon crawl, el sistema de juego gira alrededor del botín. Sí, el denominado loot. Al derrotar a los adversarios, de vez en cuando dejarán caer ítems de todo tipo, entre los que podemos encontrar armas, objetos mágicos, flechas, armaduras, etc. Al recogerlos, se irán almacenando en el inventario mientras decidimos qué hacer con ellos. Si tenemos suerte, puede que encontremos una espada de mayor nivel o un arco más poderoso. Una visita rápida al menú, y en pocos segundos estaremos presumiendo de una flamante nueva arma.
Sin duda, la forma más divertida de hacer frente a las huestes del Archimaldeano es uniendo fuerzas con otros guerreros, lo que sitúa al modo multijugador como la piedra angular sobre la que se sustenta la experiencia. Aunque podemos abordarlo en solitario, lo cierto es que gana muchos enteros cuando se hace en compañía, ya sea de manera local o a través de internet. De esta forma, es posible formar escuadras de hasta 4 usuarios que se complementen y apoyen entre sí. Además, nos veremos beneficiados por las distintas bonificaciones de las piezas del equipo que porten los compañeros.
Al iniciar cada misión, tenemos disponible un selector de dificultad que podemos modificar a voluntad. A mayor reto, mejores recompensas. Respecto a los enemigos, en Minecraft Dungeons vamos a encontrar los monstruos clásicos de la saga. Zombis, esqueletos, creepers, arañas… cada uno con sus propias características y mecánicas de ataque. Mención especial para los jefes finales, ya que son duros de pelar y no es nada fácil acabar con ellos, sobre todo en los niveles más altos. Al finalizar las misiones volveremos a nuestro campamento. Allí podemos visitar a varios personajes, los cuales nos proporcionarán objetos aleatorios a cambio de un buen puñado de gemas.
Un peculiar mundo cuadriculado
En el apartado técnico, salta a la vista que esta obra ha sabido captar perfectamente la esencia de la saga. Todos los elementos visuales están formados por cubos, lo que le confiere esa apariencia tan personal y característica que tiene la franquicia. Al igual que en la serie Diablo, en Minecraft Dungeons veremos las evoluciones de los personajes desde una perspectiva isométrica, a través de una cámara que se mantiene en una posición elevada en todo momento.
Los entornos son muy bellos y cuentan con un diseño atractivo, además de ser bastante variados. Hay de todo: minas, desiertos, pantanos, bosques, zonas costeras, etc. Los niveles se generan de forma procedural, así que el camino para encontrar la salida será diferente en cada partida. Además, es muy habitual encontrar rutas alternativas y zonas secretas en las que buscar cofres ocultos, aunque también hay callejones sin salida que no albergan recompensas.
Dentro de la selección musical predominan las melodías sosegadas y apacibles, muy en consonancia con el resto de la saga. La banda sonora está compuesta, en su mayoría, por temas suaves y calmados que encajan de maravilla en los momentos de exploración. Sin embargo, se echa en falta un acompañamiento más enérgico en los combates, pues les habría sentado de maravilla un ritmo más elevado. En cuanto a las actuaciones de voz, el juego cuenta con una narradora a la que escucharemos en la introducción. También es la encargada de recitar nuestras hazañas durante las misiones como si de un cuento se tratase.
Conclusiones — ‘Minecraft Dungeons’
Debo admitir que me he llevado una grata sorpresa con este título. Aunque no tiene el nivel de complejidad de otros dungeon crawler que hay disponibles en la actualidad, es una alternativa perfectamente válida para los que busquen una experiencia más ligera y accesible. Eso sí, los aficionados que ya estén curtidos en mil batallas van a echar en falta algunas características y opciones propias del género. Además, su duración se antoja demasiado corta, ya que es posible darle una primera pasada en unas pocas horas.
Pese a ello, Minecraft Dungeons se presenta como una magnífica puerta de entrada a los RPG de acción. A pesar de la sencillez de su propuesta, no está exento de reto, en especial cuando seleccionamos los niveles más altos de dificultad. Sin duda, el multijugador es la joya de la corona, pues las cotas de diversión suben muchos enteros cuando recorres sus mazmorras en compañía. Si a todo esto le sumamos el cariño con el que Microsoft cuida sus propiedades intelectuales, podemos estar seguros que va a contar de forma regular con la inclusión de nuevo contenido, algo que le vendrá de perlas para expandir su universo.