Los homenajes a los 16 bits siguen funcionando
Dando nuestros primeros pasos en Ghoulboy: Dark Sword of Goblin, nos ha sorprendido el intercambio de posición entre los botones de salto y ataque dónde por norma general suelen estar. Algo que nos ha costado un poco asimilar en lo que se refiere a reubicar los dedos en el lugar correcto. A diferencia de otras opiniones que hemos podido observar en las redes, nosotros creemos que es un dato a tener en cuenta y que se debe exponer, pero que no tiene por ello efecto en la valoración final del título ya que una vez aceptamos el cambio se puede jugar sin ningún tipo de problema.
La versión que hemos podido analizar para PSVITA, con el valor añadido de contar con Cross-Buy para PS4, es la de Norteamérica ya que la versión para Europa llega precisamente este mes de Junio a la Store de Sony.
Ghoulboy salió inicialmente en PC en Noviembre del año 2017 de la mano de Redro Games, pero a día de hoy está disponible en varias plataformas como XBOX o SWITCH aparte de las mencionadas anteriormente. El port para diferentes plataformas a corrido a cargo de Dolores Entertainment, a quién agradecemos enormemente su disponibilidad para resolver cualquier duda, y en especial a Daniel Navarro. También llegaron a realizar un lanzamiento mundial de una edición muy limitada en formato físico, con la ayuda de EastAsiaSoft y en el escaparate incomparable de Play-Asia.
La historia cuenta que según una profecía que se rumoreaba entre los magos de la zona, nuestro padre Galdar, tras asesinar a cientos de demonios, se disponía a terminar con la vida de Gamunbal, que reinaba en Gunzabar, un lugar sombrío y lleno de monstruos. Gamunbal conociendo su futuro más cercano, ordenó apresar a Galdar y lo encerró en una mazmorra donde iba a dejar que llegara al final de sus días. Pero la profecía estaba equivocada. Galdar tuvo un hijo, Thulgar, al que las gentes del lugar empezaron a llamar Ghoulboy, era él quién estaba destinado a cumplir la profecía, y ahí es dónde nosotros encarnamos su papel.
En este plataformas en 2D de estilo retro, nuestro objetivo es rescatar a nuestro padre, y para ello debemos recorrer los 26 niveles de los que consta, repartidos en 5 actos y con 4 combates contra jefes finales que nos vamos a ir encontrando mientras avanzamos en el juego. Estos son los 5 actos:
– Acto 1 – Gloomy Forest – Contiene los niveles desde el 1 hasta el 6.
– Acto 2 – Catacomb – Contiene los niveles desde el 7 hasta el 11.
– Acto 3 – Witch Town – Contiene los niveles desde el 12 hasta el 15.
– Acto 4 – Lair of Samora – Contiene los niveles desde el 16 hasta el 20.
– Acto 5 – Palace of Gamunbal – Contiene los niveles desde el 21 hasta el 26.
Disponemos inicialmente de una espada corta de acción rápida, pero pronto nos entregarán una que inflinge mayor daño pero más lenta. De nosotros depende decidir cual utilizar en cada momento. También tendremos dos armas arrojadizas, el cuchillo y la lanza, que vamos a ir dejando por el camino al usarlas ya que tendremos un contador de unidades limitadas, y nos serán de ayuda no sólo para matar enemigos.
En Ghoulboy debemos avanzar de derecha a izquierda, a no ser que busquemos algún objeto concreto o estemos explorando, sorteando todo tipo de peligros y enemigos hasta llegar al final de cada nivel. El primer nivel es un puro trámite a modo de tutorial y todo parece muy fácil, pero la dificultad aumenta a cada nivel superado, y os aseguramos que vais a morir bastantes veces.
En nuestro camino vamos encontrando objetos que podemos destruir como antorchas, vasijas o cofres que se convertirán en monedas que podremos gastar posteriormente para comprar armas arrojadizas, o restaurar nuestra salud. Todo ello en unos puestos habilitados para ese fin, que regenta un curioso personaje y que veremos constantemente en cada nivel. De los enemigos que derrotamos también brotarán preciosas monedas para gastar, y armas arrojadizas para repostar. A parte de monedas también obtendremos piedras preciosas que al recoger se sumarán también en forma de monedas a nuestro marcador.
En ocasiones nos encontraremos con zonas ocultas, bien abriendo el mapa verticalmente o bien cuando nos acerquemos a una pared, dónde vamos a encontrar más cofres y vasijas con monedas o perlas preciosas, que también nos llenarán los bolsillos de dinero para gastar más tarde. Este juego no es muy exigente con el combate contra los enemigos, ya que por norma general no hay muchos en pantalla, pero sí necesitamos ser muy precisos con nuestros movimientos. Ya que constantemente tendremos que ir saltando para esquivar ríos de lava o veneno, caídas al vacío, y oponentes o proyectiles en movimiento constante. Para los jefes finales sí tendremos que esforzarnos algo más.
Empezamos nuestra partida con 3 vidas. Durante el recorrido nos vamos a encontrar unos puntos de guardado, que nos permitirán volver al último activado si somos derrotados antes de acabar dicho nivel. Pero si perdemos las 3 vidas volveremos a empezar desde el inicio del nivel, algo tedioso en los niveles finales. Hay que destacar que cada vez que perdamos todas las vidas nos permiten seguir con la partida desde el último nivel. De esta forma podremos avanzar siempre aunque nos derroten constantemente en algunos puntos, hasta aprender como avanzar en esa zona concreta. Si aún así nos fuera complicado seguir adelante, podemos salir de la partida para ir al menú donde por arte de magia ha aparecido una tienda (tras superar el primer nivel) y allí podremos comprar un arma más potente, la maza, y aumentar nuestra barra de salud para poder aguantar más golpes, así como la cantidad de armas arrojadizas que somos capaces de llevar encima. Asimismo, tras derrotar al primer jefe final, también se activa el menú de selección de capítulos.
También hay unas botellas con forma de pociones por llamarlo de alguna manera, que nos sumarán vidas, pero no son acumulables y al pasar al siguiente nivel, volveremos a tener 3 vidas como mucho, aunque hubiéramos acabado el anterior con más. Generalmente estas “pociones”, que no abundan por el escenario, suelen estar escondidas en las zonas ocultas que hemos mencionado antes, o en lugares que nos costará más alcanzar.
Aunque el título sea Cross-Buy, la versión de PS4 y PSVITA difieren un poco entre sí y no son completamente iguales. También debemos comentar que la versión de la portátil de Sony no es igual de fluida que en sobremesa, y hemos encontrado en ocasiones una pequeña pausa durante la acción, que puede dar al traste con el cálculo de un salto al no tener control en tiempo real del personaje.
Aparte de movernos a través de las plataformas combatiendo contra todo aquel que se ponga por delante, en Ghoulboy también deberemos encontrar llaves para abrir puertas, accionar palancas, o en definitiva, resolver puzzles de interacción con el escenario. Ghoulboy no pretende deslumbrarnos, es honesto con lo que nos ofrece, y nos entrega todas sus armas desde el minuto uno.
Es un título que rememora la época retro en la que está inspirado, y cumple a la perfección en ese aspecto. La música que acompaña al juego, creada por Nicole Marie T también nos evoca hacia los tiempos del sonido chiptune y en su conjunto es un perfecto homenaje traído a nuestros días.