Steam OS, el nuevo sistema operativo de Valve pensado para jugar, lleva con nosotros desde hace poco tiempo, pero parece que las cosas no le están yendo tan bien como nos gustaría. Según ArsTechnica, el rendimiento general de los juegos es inferior en Steam OS, debido a que las herramientas OpenGL y los motores actuales no consiguen rendir al mismo nivel que DirectX corriendo con Windows.
Mientras las pruebas con Geekbench 3, un test sintético general para analizar la CPU, los resultados son similares en ambos sistemas (gana Windows 10 por poca diferencia), las diferencias se amplían en las pruebas con juegos, donde las comparativas llegan a ser “odiosas” para el SO de Valve. ¿Quéreis ver donde está el punto fuerte de cada uno? Aquí os lo dejamos: