¿Es mejor fingir o negar la madurez?

Con el última E3, me he sentido un poco decepcionado al final. Y no por los juegos, no, muchos de ellos se ven increíbles. Si no por el hecho de que no vimos mucho riesgo este año. En la industria de los videojuegos, durante 2013, vi un gran cambio de mentalidad con los estudios. DmC Devil May Cry intentó hacer una crítica hacia el consumismo y el control de los medios. Assassin’s Creed 4 intentó hablar sobre la naturaleza de los gobierno opresivos y las rebeliones. Ryse: Son of Rome fue alabado por su historia que se planteaba ser madura y emocional. Killzone Shadowfall intentaba hablar sobre política bajo su propio trasfondo. Y así podemos poner varios ejemplos.

Sin embargo, todos ellos fracasaron en lo que se proponían. Sus historias estaban mal hechas y desarrolladas y no eran para nada trascendentales. Pero lo que me fascinó, es que al menos lo intentaban. Fingían ser maduros porque se cansaron de hacer historias sin sentido. Y eso es algo que se les debe de reconocer. Pero este año muchas cosas han cambiado, o al parecer, en el 2015 muchas cosas cambiarán. Durante la E3 2014 vimos muchos videojuegos que traían aire de fresquedad, de ser algo nuevo y que valía la pena. Sunset Overdrive se ha ganado mi corazón por tener tanto carisma y por su habilidad de burlarse de los shooters genéricos. Pero es todo lo opuesto de lo que vimos en 2013. El videojuego de Insomniac es todo colorido, divertido y al parecer tendrá una historia bastante genérica. Y no tengo problemas con eso, me parece que será un videojuego increíble.

Pero el problema que tengo es que muchos videojuegos seguirán esa línea. ScaleBound parece ser un mata dragones con un contexto que tratará de justificar muy malamente el por qué estamos ahí, por lo que no creo que tenga una historia digna de ser recordada. Crackdown 3 es un videojuego puramente mecánico, por lo que no espero mucho de él y Halo 5 simplemente es una aventura de fantasía sci-fi. Tal ves sea porque me he vuelto muy escéptico y muy desconfíado de la ruta que están tomando los videojuegos, pero es que creo que hicieron falta títulos que “prometemos una gran historia que reflexione sobre la humanidad y bla bla bla” y no se qué pensar sobre eso.

Tal ves sea porque ya dan por hecho que esperamos una historia de esos calibres, tal ves sea porque no la tendrán en lo absoluto y se enfocarán en la jugabilidad, tal ves sea por alguna otra razón diferente. Pero no he visto en ninguna parte que hayan presumido de que “Assassin’s Creed Unity tendrá una historia muy madura que hable sobre una revolución violenta desde un punto diferente y bla bla bla”, tampoco he visto que hayan promocionado a Rainbow Six Siege con un trailer mega emotivo con una historia reflexiva, es más, hasta los desarrolladores han admitido que se están enfocando primero en el multijugador antes de hacer la historia. Y de nuevo, no tengo problemas con todo esto. Pero me entristece que en vez de que traten y se esfuerzen por hacer algo diferente, hagan cosas que bien se pudieron haber hecho hace varios años.

Pero no todo está “perdido”. Battlefield Hardline presume de sus grandes escritores que vienen desde House of Cards. Call of Duty Advanced Warfare también se viste de gala para presumir a su Kevin Spacey (con un rol similar al que tiene en House of Cards….) y a su súper narrativa que toma influencias de The Last of Us (¿?). Y se que ambos fracasarán como siempre. Pero me encanta el hecho de que traten de madurar. De que cada vez traten de vincular más la jugabilidad con un guión que sea de calidad. Pero encontes ¿es mejor que Call of Duty finga tener una buena historia? ¿o que ScaleBound pase totalmente de todo eso y se enfoque mejor en la jugabilidad? Yo digo que ambos son necesarios. Pero debe de haber una regulación para que tengamos lo mejor de dos mundos. Y creo que este año faltaron los videojuegos “reflexivos y emotivos”.