El videojuego: ese producto de entretenimiento que tanto disfrutan los niños de hoy en día; esos dispositivos electrónicos donde pudren sus mentes mientras intentan ganar y salvar a la princesa de turno; aquella moda de viciarse en un mundo virtual lleno de violencia, drogas y sexo; lo más que se puede decir de estas “cosas” es que no aportan nada a la raza humana ni a la cultura en general… o espera ¿sí lo hacen? ¿puede ser que los videojuegos sean más que eso?
Lamentablemente, los videojuegos se encuentran en una posición risible ante gran parte de la sociedad. Siempre que se habla de ellos se les identifica como generadores de violencia o estupidez. El estatus actual del medio es bastante humillante: tanto por dentro, como por fuera. La comunidad de videojuegos todavía no termina de madurar gracias a una guerra de consolas innecesaria la cual genera connotaciones como hacer pensar a los demás miembros del planeta que somos niños pequeños en busca de los mejores gráficos y simuladores de matanza ¿Pero qué mas se puede pedir? este medio sigue prácticamente en pañales… aunque ya no tanto. Ya han pasado 40 años desde que apareció Pong, y en todo este tiempo, a los videojuegos todavía no se les considera arte, o por lo menos, cultura. Ahí tenemos a varios grandes como Another World, ICO o Journey: videojuegos que han demostrado de lo que es capaz este medio, y aún así, tenemos a varias personas burlándose de nosotros de manera frecuente.
Siempre que se meten con los videojuegos, salto como un león feroz a quien le acaban de interrumpir su maravillosa siesta en busca de quien sea que haya hecho una declaración ofensiva en contra de nuestro querido medio, y en este caso el premio se lo lleva Forges, un humorista gráfico. El problema empezó cuando hace poco la persona mencionada publicó una tira humorística en donde se burla de que califiquen a Destiny como un producto cultural, y de paso, se burla del hecho de que poco a poco se esté considerando a los videojuegos como cultura. Pero antes de volvernos todos locos, vayamos por partes.
Sí, este será otro artículo lleno de definiciones, pero es que es necesario hacer esto para poder marcar mejor el contra-argumento. ¿Qué es cultura? Cultura, según la RAE, es muchas cosas, pero la definición que buscamos esta vez es esta: “Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc.” y aún así no termina por ser totalmente adecuada, si le rascamos más, podemos llegar a lo que viene siendo cultura popular, la cual se define como: “conjunto de patrones culturales y manifestaciones artísticas y literarias”
Si los videojuegos son un arte o no, es un tema que he cubierto con anterioridad, al igual que la razón del por qué todavía no se les considera como tal. Pero una cosa es el arte, y otra es la cultura, y para poder llegar a un veredicto final, debemos extrapolar un poco: ¿El cine es cultura? sí, lo es, el saber el nombre de directores, actores y cintas clásicas, es considerado “esencial” dentro de la sociedad para poder tener un tema de qué hablar, para poder ser considerado una persona que sabe algo del mundo, el cine es la forma de entretenimiento más grande que hay actualmente (al menos de forma main-stream); ¿La música es cultura? por supuesto que sí, el conocer a The Beatles o Michael Jackson es algo casi universal, su música ha trascendido más allá de su propio medio. La música es algo que ha estado con nosotros desde que el humano piensa, por supuesto que es cultura; ¿Los videojuegos son cultura? sí, lo son, mucha gente en este planeta saben quién es Mario y qué es Nintendo, y aunque hablar sobre ello pueda que se vea infantil, varios personajes de este medio y distintos títulos han trascendido más allá de nosotros.
Y eso es momentáneo, entre más vayamos avanzando en la historia, más gente podrá hablar de videojuegos sin que se les vea raro. Los niños, adolescentes y adultos jóvenes que crecieron con sus consolas, tendrán hijos y les inculcarán que los videojuegos no son solamente simples mata-marcianos (o eso espero), llegando a un punto en el que se les verá como algo normal dentro de la sociedad, y con suerte, se les verá como un tema importante. Como bien dijo nuestro querido boss hace unos días: “Cuando apareció el cine, muchos de los críticos de la época se ensañaron diciendo que no tendría futuro ni alcanzaría la importancia social del teatro y con el paso del tiempo hemos visto que no sólo no ha llegado a su altura si no que actualmente ha calado mucho más en la sociedad” Y ese caso no solamente sucedió con el actual séptimo arte: cuando apareció por primera vez el movimiento cubista, muchos grandes críticos de arte dijeron que estas vanguardias no se iban a quedar con nosotros mucho tiempo, en palabras de Arsene Alexandre, columnista de “Le Figaro”: “una simple locura, sin principios serios y sin alcances; […] para diversión de los papanatas en los residuos de las escuelas” ¿Y sabes qué Arsene? En los libros de historia actuales estudiamos a grandes como Pablo Picasso o Juan Gris.
Por más que haya criticado a la beta de Destiny, debo admitir que este juego, queramos o no, trascenderá más allá de nuestro propio medio; con gente como Peter Dinklage o Paul McCartney involucrados en el proyecto, no será raro que nos encontremos a gente que ni sabe de videojuegos, hablando sobre el nuevo título de Bungie. Desde el juego más obscuro de Steam, como lo podría ser Dominique Pamplemousse; hasta lo más exitoso del mercado, como podría ser Call of Duty; los videojuegos son cultura, forman parte de los conocimientos generales, aunque sea de manera reducida. Y reitero lo que dije en el párrafo anterior, entre más vayan pasando los años, la fuerza que adquirirán en la sociedad, solamente incrementará.
Entonces Forges ¿por qué los videojuegos no son cultura?
Le cedo la conclusión a unas palabras muy ciertas de Keith Stuart: “Una vez que te encuentras cuestionando la validez de un nuevo medio cultural, ya no tienes relevancia; automáticamente te has encerrado en un periodo de tiempo, y tu periodo se ha acabado.”
fusrodah
Acertado artículo, me quedo con la última frase ya que es un genial resumen de lo que mencionas. Para mi cualquier disciplina en la que el ser humano ponga sus capacidades al servicio de crear algo pasional y que le llene lo considero cultura. Y los videojuegos por lo tanto lo son y mucho.
amador154
Yo creo que depende del juego, si aporta algo si es cultura, si es un Call of Duty mucha cultura no proporciona…
Luis León
Claro, en eso estoy de acuerdo, pero para poder crear un punto más fuerte, y si de verdad queremos hacer un cambio, por más pequeño que sea, debemos también intentar aceptar a esa clase de videojuegos Triple A.
CelScipt
En esta ocasión si puedo ceder a dicha opinión, a que sea factible tu idea. Los videojuegos han llegado al cine (no necesariamente sobre adaptaciones, ahí tienen a Rompe Ralph, creo que se llamaba la película) por supuesto que es cultural en términos oportunos y de cierto sequito de opiniones. sin embargo se nos sigue tratando de ciudadanos de ”Clase B, sin pasaporte”, eso implica que aunque seamos un medio, pro-cultural (Silent Hill 2, es un juego que ha transcendido a mentes despiertas) este trato aun se conserva, incluso entre nosotros hacemos caso omiso de este comportamiento.
En todo caso, gran articulo que releído muchas veces, pero tenemos nuestras carencias y esas son a valorar. Por cierto en Alemania, hace ya algún tiempo (1 o tal vez 2 años antes), los videojuegos fueron declarados medios ”culturales”, pero este reconocimiento aunque podemos afirmar que es a nivel mundial, no se ha hecho del todo respetar, un medio joven con ganas de crecimiento, requiere de ciertas practicas para no terminar siendo algo que no es o que aparente ser, otros lo han hecho sin éxito, nosotros estamos a las puertas, pese al camino que nos queda.